Haedo jugará el Flex

Haedo, con una población de 41.000 habitantes enmarcados en un radio de 6,2 kms cuadrados dentro del Municipio de Morón,  suma un nuevo integrante a la familia FeBAMBA. Sportivo Haedo, tras casi dos décadas jugando en una liga zonal, decidió incorporarse a los torneos Flex, conocidos durante 2014 como Addys.

Esta institución, ubicada en la calle Héroes de Malvinas 72, incorporó nuevamente como entrenador a Osvaldo García, quien desempeñó ese rol anteriormente durante 16 años, y en los últimos tres trabajó en Centro Español. Con él, acompañado por sus hijos Rodrigo (U-15, U-17 y U-19) y Gonzalo (premini y mini) además de Maribel Carballo (jugadora de Los Indios)  a cargo del femenino.

Osvaldo es un hombre con muchísima trayectoria en el ambiente. Arrancó en El Trébol de Haedo, Social Club de Villa Sarmiento y luego llegó a Ramos Mejía LTC, allá por los años 82 al 85. En el Rancho, dirigió entre otros a Ignacio Romero, Carlos Henault, Julio Grovery al Laucha Boggiano.

En su primer paso por Sportivo, su función formativa ayudó a nutrir entidades vecinas. «Abastecíamos a Argentino de Castelar, Ramos Mejía, Estudiantil Porteño, Ateneo Popular de Versailles. Aún hoy día tengo chicos jugando allí, tales los casos de Ignacio Siniuk, Tiago Scarpione y Agustín Monroy, que están en Porteño, y Pablo Zapata, asistente de Gastón Peveri en GEI», cuenta García, padre de una familia netamente volcada a este deporte: además de sus hijos, su esposa, Andrea Tuñón, fue jugadora hasta el momento donde nació Rodrigo, el mayor. Por si fuera poco, su suegro fue árbitro, y su suegra – hoy fallecida -, oficial de mesa.

«Tanto a Rodrigo como Gonzalo los fui formando desde hace cinco años, aquí en Haedo; una vez hecho el curso de entrenadores en La Plata, me acompañaron en Centro Español y cuando tuve que partir de allí, vinieron conmigo a trabajar en este proyecto», relata el entrenador.

Al momento de preguntarle por qué se fue del otro club de Haedo, quien la pasada temporada disputó el Nivel 2 de la conferencia oeste tanto en formativas como superior, Osvaldo es enfático al señalar: «Mi  paso por Español me deja muchas enseñanzas; lamentablemente no pudimos culminar nuestra tarea porque los dirigentes consideraron apostar a otro proyecto, pero armamos todo el básquet masculino, que el club no tenía y conseguimos un campeonato del nivel 8 en Sub 19 masculino, uno de Sub 13 y Sub 15  femenino y un campeonato de Primera Femenina en el 2013».

Transmite cierto dolor cuando se refiere al tema, principalmente por los buenos vínculos desarrollados con padres y jugadores, pero lo toma como parte de las enseñanzas mencionadas. «Un número importante de ellos quisieron que nos quedáramos, pero la dirigencia optó por cambiar, y allí fue donde surgió esta posibilidad, con posibilidad de integrarnos a las competencias de FeBAMBA. Gran parte de las chicas, al enterarrse, vinieron con nosotros. Haedo es mi segunda casa, yo aquí formé una familia. Imaginate que muchos arrancaron en mini y terminaron jugando en primera conmigo.Y bueno, cuando supieron que me iba de Español varios quisieron acompañarnos», recuerda.

¿Por qué decidieron integrarse a FeBAMBA? En las palabras Osvaldo no hay dudas al afirmar que «el mejor básquet indudablemente está aquí, y al plantearlo. los jugadores se entusiasmaron con la idea de jugar este torneo Flex. Además, la institución siempre exportó talentos hacia clubes vecinos, y ahora que estoy viejo quiero disfrutarlos en un equipo dirigido por mí (risas)». Hay otra razón: su último paso por esa liga zonal, quedó marcada por una mala experiencia al momento de disputar la final. «En el momento de retirarnos, la gente del club rival nos robó, le pusieron un arma en el pecho a mi hijo, quien terminó internado en el hospital de Pilar. Cuando regresamos aquí, lo primero que tuvimos por seguro era no volver a esa liga, porque nuestra intención es tener la cabeza puesta en jugar y no en cómo salir de la cancha».

Más allá de ese contratiempo, aislado pero sin dudas marcando a fuego la familia, otro de los condimentos por integrar los torneos Flex es que los mismos serán plataforma para en 2016 integrarse al Nivel Formal. «A eso apuntamos, trabajar este año con nuestros chicos así estaremos en condiciones de pertenecer a la Conferencia Oeste. Actualmente contamos con unos 30, y aspiramos aumentar dicha cantidad».

Los días y horarios de entrenamientos son martes y jueves de 19 a 20 hs  (U-13, U-15, U17) y de 20 a 21 hs (U-19 y Primera); en tanto los lunes, miércoles y viernes de 17 a 19 premini y mini.

¿Con qué espera encontrarse en los torneos Flex?: «Tenemos entendido que la primera fue muy competitiva, y las formativas tuvieron buen nivel; deseamos encontrar una competencia aún mejor, porque le servirá mucho a nuestros jugadores».

La camiseta posee colores similares a la de San Lorenzo; «incluso en la época donde Carlos Abdo era presidente del Ciclón – del cual Osvaldo es hincha -, me habían tentado para ser filial. Una propuesta similar la tuvimos de Castelar y Deportivo Morón». El club dispone de cómodas instalaciones, cancha reglamentaria, aros rebatibles y tablero electrónico con todas las actualizaciones requeridas.

Osvaldo García volvió donde vio nacer muchos jugadores que después formaron parte de las competencias oficiales de FeBAMBA. Hoy, junto a sus hijos, trabaja por instalar al club como uno más dentro de la Región Oeste.

FUENTE: Luis Desimone – Prensa FEBAMBA